Cuando me pongo a leer o escuchar
una bella poesía siento de la
mano del poeta una emoción que al
recitar, parece estar escuchando
un concierto.
Celestial porque la rima se oye
una y otra vez como el martillo
en el yunque o el cantar de la
alondra, llenando los aires de
notas preciosas.
Que al ritmo de su vuelo llena el
cielo de amor, por eso amiga María
Cristina, cuando empiezas a escribir
me llega arte al viento cual velero
que navega.
Sorteando las olas con maestría
Sin igual, tu poesía es amor
fresco que al compás de las olas
navega como el aire que nos trae
tu brisa
Como la gaviota se mece al viento
yo quisiera llevarte Amor y mi
sonrisa, para que en tu corazón me
pongas y sentir tu amor al despertar
cada mañana.
Que no hay nada más grande y hermoso
que el amor que de ti emana al coger
la pluma, por eso quiero sentir, al
despertarme el calor que desprende tu
pecho.
Y la luz de tu mirada y el candor de
tus besos, el olor a olas de ese mar
que nos separa en la distancia, pero
evitar no puede, ese sentimiento que
transmites, un besazo amor.
El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 28-01-2014.
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