domingo, 30 de abril de 2017

Amor palabra divina que del cielo me llegó

Que del cielo me llegó,
que me hizo caer en tus
brazos provocado, por 
la miel de tus besos.
Veneno dulce que mata
de placer y embeleso,
más todos a el acudimos
es el amor corre presto.
Que si llega una ráfaga de
viento puede volar muy lejos,
y caer en otros lares, preso
de otros quereres, cautivo
de otras voluntades.
Que te impidan atraparlo,
disfrutarlo y toda una vida
conservarlo, es maravilloso,
pero liviano, fugaz, y veloz
como el viento.
En una noche de luna clara,
absorto en el silencio, contemplaba
curioso como mi pecho amoroso,
a tu amor cantaba, me olvidaste amor.
Dejastes mi corazón desgarrado
y no sé que más me duele, si
haberte perdido, o que tú me
hayas olvidado, mi corazón vaga triste.
Cuando un amor se vá no llores,
corazón, puede que un día
lo mismo que ese se fué,
arrastrado por el viento,
otra ráfaga te traiga, otro mas
cariñoso y atento.
Perdona su miopía no supo ver
el valor de lo que perdía,
sucedió que no apreció, lo que
a su mano tenía, de pequeño una
canción oia, que la mancha de una
mora, con otra verde se quita.
El Ruiseñor.

Agustin Recio Borreguero, Copyright, 17-04-2017

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tus comentarios.