Si poder yo tuviera, para en un
lienzo plasmar, mis pinceles
pintarían, cuadros de felicidad,
donde una mano repartiese, amor
cariño y bondad.
Pero como no se hacerlo, me pongo
despierto a soñar, viendo como
de mi corazón sale, un manantial
de cristalinas aguas, con destino
ser venero de paz.
Para acudir a beber, todo el que
tenga sed y pueda a los suyos,
llevar, agua que la calme y haga
penas olvidar, que cure dolores
penas y hambre.
Y haga a los pobres, soñar, con un
mundo feliz, donde impere el amor,
justicia y caridad, mundo donde no
quepan, egoismos, envidia y maldad,
haciendolas pasar al olvido.
Y se dediquen a sembrar, amor en los
corazones, amor, trigo y paz y que
a nadie le falte dignidad, ese mundo
es mi sueño y a todos os quiero en
el implicar.
El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 28-02-2018.
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