habia noticias de nevadas,
al calor de las sábanas, quedé
dormido comencé a soñar.
Veia una gran montaña,
toda ella nevada, en su falda
una gran esfinge apareció,
la veia en su pecho una rosa.
Esa cara me miraba me ofrecia
sus labios grana, su pelo rubio,
sus ojos verde esmeralda,
que brillaban como el sol.
Soñé con su amor esa cara
era mi amada, me pedia amor
me acerqué a sus labios
deposité un beso la nieve.
Se derritió se levantó ella,
la veia alegre había llegado
su amor, eshalaba un perfume
de rosas la cogí de su mano.
Nos fuimos lejos muy lejos,
en alas del viento a una nube.
en la cumbre a lo lejos habia
un precioso palacio, salió el
sol.
Apareció una preciosa llegua
blanca,venia enjaezada marcando
el paso, nos invitó a subir,
comenzó su camino.
Se estaba quedando, un dia divino,
hasta allí nos llevó, bajamos
una hermosa dama nos recibió,
pasen señores les esperamos.
Algo ocurrió sonó el despertador
el sueño se interrumpió, en el
momento más inesperado, sonó el
despertador, el palacio se veia,
impresionante.
El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 21-11-2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios.