Antes de irme a la cama

Rezo mis oraciones y a Dios le pido
que nunca me abandone, en sus manos
tranquilo me siento, descanso feliz
mi mente se apacigua, la invade la
calma.

Esta vida pasa rauda y veloz como el
viento y los deberes hay que hacer,
no hacerlos supone que en el camino,
te puedes perder y al precipicio te
puedes caer.

Hay que dar pasos firmes sin desvio
del camino, solo así se llega sin
perderse a destino, que no venimos
a acaparar con avaricia ni a pelear
con injusticia.

Creced y multiplicaos, pero una cosa
os dí, inteligencia y otros dones,
para usarlos, con alegría y seréis
felices y algo en cuenta habréis de
tener.

De aquí os vais desnudos como vinísteis
no os esforceis en lo que nada vale,
limpiar de piedras el camino y será más
plácido caminar, no sembréis semillas
al viento.

Sembrar paz, amor y caridad, abonar
la sementera y el grano germinará,
dará abundante cosecha, pero las malas
hierbas escardar, dejarla que sequen
para encender el fuego servirán.

El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 09-06-2017,