Hacia donde caminamos

Cada cual es responsable de lo
que hace, no nos escudemos en
lo que hace el otro o en lo
que está bien o mal visto, hay
que actuar en conciencia.

Aunque mirando alrededor, creo
se está perdiendo el norte y
si vivimos en un pueblo de raíces,
profundamente cristianas, no hay
que avergonzarse.

Si se es de las convicciones,
adquiridas a lo largo de una
vida y mamadas de una madre,
que lo era y había un respeto,
¿ ahora qué.???

Tal vez hemos pasado del todo
pecado, a la orilla opuesta
dándose la paradoja, que a la
mínima justificación, vemos
como cosa normal.

Que hay que matar al enemigo,
no juzgues y no serás juzgado,
quien niega a su prójimo, me
niega a mí, decía Jesús, por
contra.

Amemos a nuestros semejantes
y estaremos sembrando amor,
la maldad y el odio solo nos
conducen al precipicio, y
debemos evitarlo.

Abramos los ojos y aportemos
luz a la razón, sembremos
amor y cosecharemos felicidad,
viviremos una vida que nos
llevará a un mundo justo.

El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 17-04-2017