correr, hacer un alto en
el camino, pararnos permite
meditar, tal vez otear.
Para así encontrar, el
mejor camino, lo que
seguro es, nos permite
llegar, bien a destino.
Acomodar, nuestra vida a
las exigencias del lugar,
evitar pedregales, no
arrimarse, demasiado a
zarzales.
Que distraernos puedan y
caminaremos seguros en la
vida, aunque por vereda
sea, que es mejor avanzar.
Que ir en coche de lujo y
salirse de la carretera,
hay que buscar la manera,
de encontrar lo que buscamos.
Porque si nos equivocamos,
hay que volver a empezar,
con lo que ello acarrea,
al perderse en un lugar.
El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 16- 05- 2016
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