El Prodigio de la Creación

Si miramos el mundo con los ojos del
corazón, no pasará desapercibida
tanta belleza, como nos regaló El
Creador, cuanto amor puso en todo,
en la mujer se lució.

Qué bellezas hay por el mundo, hasta
pájaros no dio, para repartir sus
trinos y sus cánticos de amor, nos
enseñan con ejemplos a los suyos a
querer.

Como empollan sus pollitos y los ceban
a placer, los vemos abrir el piquito,
para que sus padres les den, alimento
que es su vida, pues acaban de nacer,
como crecen.

A los quince días en el nido no los
ves, se los llevan volando no se
vayan a perder, recuerdo como hace
años, una perdiz en mi parcela empolló,
cuando yo llegaba.

El macho avisaba desde el tejado con
temor, cuando me iba y mi mujer salía
y se ponía a regar, la perdiz los
sacaba para que saciasen su sed, no
logré verlos.

Catorce pollos tenia, cobijados en una
chumbera, sus pollitos protejia, al
año siguiente volvió a anidar y la
descubrió una gata y mató a la perdiz,
cuanto lo sentí.

El Ruiseñor.
Agustín Recio Borreguero, Copyright, 14-07-2017.