Caminos de ilusión nos llevan al amor

La vida es un camino, que se
puede, recorrer, caminando, 
entre tinieblas, o con luz,
disfrutando amor, elijo el
segundo.

La luz nos permite ver, donde
caminar podemos, para no caer,
en precipicios y encontraremos,
ese anhelo soñado, que desde
el principio.

Buscamos, cuando lo vemos a lo
largo del camino, decimos, soy
feliz, encontré amor, la alegría
de vivir, el placer de sentir.

He descubierto el Amor, mi corazón,
palpita, lleno de ilusión, mi
vida se llena de luz, aroma y
color, a eso solo una cosa, llamarle
puedo.

No concibo otro nombre, ni otra
definición, por mas vueltas,
que le doy, siempre me sale lo
mismo, una palabra, llena de
luz,  amor.

Unos ojos me encontré, verde
como la esmeralda, seguidos
de unos labios, grana como el
rubí, con una sonrisa, que
solo.

Verla ya me cautivó, sus ojos
me hablaban, me decían tengo
corazón, un corazón que se abre,
cuando encuentra algo que busca,
Amor.

Mi mente soñaba y despierto
estaba, me decía, si fuese
colibrí, yo libaría el néctar,
de sus lindos labios, disfrutaría.

Del placer, de la miel de sus
besos, de ese cariño inmenso,
que guarda en su corazón, la
ofrecería el mio para toda la
vida.

Con ilusión la abrazaría y no
solo eso, mi corazón la entregaría,
y al altar, vestida de blanco,
con corona de azahar, cogida del
brazo, yo la llevaría.

El Ruiseñor.

Agustín Recio Borreguero, Copyright, 19-06-2017.